Las uvas han sido, a través de su larga historia, mucho más que una fruta deliciosa. A medida que la nutrición moderna se inclina hacia los alimentos funcionales, las uvas han captado el interés científico debido a su alto contenido de compuestos bioactivos conocidos como polifenoles. Estos compuestos vegetales naturales no solo son responsables de los vibrantes colores y sabores de las uvas, sino que también ofrecen prometedores beneficios para la salud. Los investigadores ahora están relacionando estos compuestos con una mejor salud cardíaca y un mejor control del azúcar en sangre, dos preocupaciones apremiantes en el panorama de la salud actual.1
Estudio
Durante las últimas décadas, numerosos estudios han examinado los efectos de los polifenoles de la uva en la salud cardiovascular y la diabetes, en particular los presentes en las uvas rojas, el jugo de uva y el extracto de semilla de uva. Investigadores franceses de la Universidad de Burdeos han explorado diversos aspectos, desde la presión arterial y el colesterol hasta la inflamación y la sensibilidad a la insulina. Cuarenta y cuatro ensayos clínicos y publicaciones que involucraron tanto a individuos sanos como a aquellos con factores de riesgo, tales como el síndrome metabólico o la diabetes tipo 2, han sido fundamentales para esta extensa revisión científica.
Resultados
Lo que destaca de la investigación es cómo los polifenoles de la uva afectan múltiples aspectos de la salud cardíaca y metabólica. En personas con prehipertensión o hipertensión leve, se ha demostrado que el extracto de semilla de uva reduce la presión arterial sistólica hasta en 11 mmHg (milímetros de mercurio).
Otros estudios informaron mejoras en los niveles de colesterol, concretamente una reducción del colesterol LDL (colesterol "malo"), un aumento del colesterol HDL (colesterol "bueno") y una reducción de los triglicéridos.
En cuanto al estrés oxidativo y la inflamación, los polifenoles de la uva ayudaron a reducir los niveles de LDL oxidada perjudicial y marcadores inflamatorios como la proteína C reactiva.
Algunos estudios incluso observaron una mejor sensibilidad a la insulina y una reducción de los niveles de insulina en ayunas, especialmente con vino tinto desalcoholizado y suplementos ricos en resveratrol.
¿Qué significa esto?
Los hallazgos de esta revisión científica ofrecen una perspectiva práctica sobre cómo las uvas pueden ayudar a mejorar la salud cardíaca y el control de la diabetes. Aunque no sustituyen a los medicamentos ni al tratamiento médico, añadir uvas o productos a base de uva, como zumo sin azúcar o extracto de semilla de uva, a la rutina diaria puede complementar otros hábitos saludables. Para obtener mejores resultados, deben consumirse con regularidad y como parte de una dieta rica en nutrientes.
Si bien factores como la dosis, el tipo de producto y las condiciones de salud individuales también influyen, los polifenoles de la uva ofrecen un prometedor aliado alimenticio para quienes necesitan controlar la glucemia o la salud cardíaca. De igual manera, opciones ricas en polifenoles, como los arándanos azules, el té verde y el cacao también comparten propiedades cardioprotectoras y antidiabéticas.
Fuentes
- Molecules, Grape Polyphenols' Effects in Human Cardiovascular Diseases and Diabetes, 2017
Notas a pie de página
- Journal of Food Biochemistry. (2022). Health benefits of polyphenols: A concise review. Retrieved March 25, 2025, from https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/35694805/




