Los arándanos azules, pequeños pero poderosos, han sido reconocidos durante mucho tiempo por su color intenso y su dulzura. Pero más allá de su atractivo, contienen un arma secreta: las antocianinas, responsables de su característico tono azulado, son poderosos compuestos vegetales que pueden ayudar a regular el azúcar en sangre y favorecer la salud cardíaca.1
Para quienes padecen diabetes tipo 2, es crucial encontrar maneras naturales de equilibrar los niveles de azúcar en sangre. Si bien la medicación y los cambios en el estilo de vida son fundamentales, investigaciones recientes sugieren que el consumo de arándanos azules podría contribuir al control de la diabetes. Un estudio reciente se propuso explorar su eficacia para mejorar la salud cardiometabólica en personas con diabetes tipo 2.
Estudio
Para explorar la relación entre el consumo de arándanos azules y la diabetes, los investigadores realizaron un ensayo doble ciego controlado con placebo en el que participaron 52 hombres adultos. Los participantes, entre 51 y 75 años, padecían diabetes tipo 2 y fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos.
Un grupo consumió 22 gramos de arándanos azules liofilizados al día, equivalentes a aproximadamente una taza de arándanos azules frescos, mientras que el otro grupo recibió un placebo diseñado para igualar el contenido calórico y de carbohidratos del arándano azul en polvo.
Los participantes continuaron con su dieta habitual y fueron monitoreados durante ocho semanas. Los investigadores midieron marcadores clave de salud, como niveles de azúcar en sangre, colesterol, triglicéridos, enzimas hepáticas y presión arterial, antes y después del estudio, para evaluar cualquier cambio significativo.
Resultados
El estudio reveló que los participantes que consumieron arándanos azules experimentaron mejoras notables en el control de la glucemia. Sus niveles de hemoglobina A1c, un marcador clave para la regulación de la glucemia a largo plazo, fueron más bajos en comparación con los del grupo placebo. Los niveles de fructosamina, otro indicador de la estabilidad de la glucemia, también mostraron mejoras.
Además, quienes consumieron arándanos azules presentaron niveles más bajos de triglicéridos, importantes para la salud cardíaca, y niveles reducidos de enzimas hepáticas, lo que sugiere una mejora de la función hepática.
Sin embargo, el estudio no encontró cambios significativos en otros marcadores, incluyendo glucemia en ayunas, niveles de insulina, el colesterol total, LDL y HDL, presión arterial y peso corporal entre los dos grupos.
¿Qué significa esto?
Los hallazgos de este estudio ofrecen evidencia sólida de que los arándanos azules son beneficiosos para las personas con diabetes, ya que ayudan a mejorar el control de la glucemia, reducen los triglicéridos y favorecen la salud hepática. El ensayo también refuerza la idea de que la alimentación puede desempeñar un papel crucial en el control de la diabetes tipo 2.
El dulzor natural de los arándanos azules los convierte en una excelente alternativa a los snacks procesados y azucarados. Incluirlos junto con otros alimentos ricos en polifenoles, tales como las frambuesas, la col rizada y las nueces pecanas, no solo puede ayudar a mejorar el control glucémico, sino también a mejorar la salud cardíaca en general.
Fuentes
- Current Developments in Nutrition, Effect of Blueberry Consumption on Cardiometabolic Health Parameters in men with Type 2 Diabetes: An 8-Week, Double-Blind, Randomized, Placebo-Controlled Trial, 2020
Notas a pie de página
- Pharmaceuticals. (2022). The Role of Anthocyanin in Modulating Diabetic Cardiovascular Disease and Its Potential to Be Developed as a Nutraceutical. Retrieved March 12, 2025, from https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC9692260/




